Doña Amelia Castro es anciana ejemplo de resistencia y dignidad. A sus 91 años esperaba morir en el hogar que la vio crecer; en su terruño al que se aferró para que Emgesa la multinacional que construye la represa El Quimbo no le arrebatara su morada.
Sin embargo, ese deseo y esa fuerza de resistencia se vio interrumpida cuando una noche de sábado de manera inesperada, la multinacional de forma humillante la desalojó de su casa en corregimiento del Balseadero a orillas del río Magdalena. Su vivienda indignamente fue destruida.
“Doña Amelia Castro, había tomado la decisión de morir dignamente en su predio como testimonio memorable de su lucha por la defensa del territorio. Emgesa interrumpió su vida tranquila cuando ella permanecía dialogando con la naturaleza, sus hijos y sus nietos. Asaltó sus predios con retroescavadoras, guardias privados y perros amaestrados. No cedió a la agresión. La empresa, asida de la mano del gobierno, a nombre de la gobernanza con la diligencia de Fabiola Castillo, del Programa Presidencial de Derechos humanos, ante la inquebrantable voluntad de una anciana de 91 años, optó por la fuerza, por la violencia, para desalojarla y destruirles sus bienes con los que formó a sus hijos y a sus nietos. Es un crimen sin precedentes que clama justicia, la que nace de la resistencia, porque los jueces de la República, especialmente los del Huila, deben estar embriagados festejando la actitud criminal de la empresa y el Estado”, puntualizó Karito Rojas sobre el hecho.
Amelia Castro es tan solo el ejemplo de muchos otros campesinos que si tener más a donde ir, han retornando a defender su territorio o se han quedado en sus casas a pesar de las amenazas de desalojo para defender dignamente la vida y el territorio.
Según Asoquimbo, días después de conocida la noticia del desalojo y destrucción de los bienes de quien permanecía en su predio en el Balseadero del municipio de Agrado, resistiendo por la defensa de su territorio, amenazado por Emgesa, apareció Fabiola Castillo quien se identifica como protectora de los Derechos Humanos, comisionada de la vicepresidencia de la República. Cuando se esperaba un pronunciamiento por el crimen de Emgesa perpetrado contra Doña Amelia Castro, asida de la mano de Camilo Castrillón funcionario de la compañía y el procurador agrario de apellido Tafur, sorprendió a afectados por el Quimbo del Corregimiento de la Jagua, que protegen del saqueo del patrimonio arqueológico por parte de EMGESA, al persuadirlos de acercarse al despacho de la transnacional en el municipio de Garzón a censarse como lo pretende Emgesa desacatando la Sentencia T 135 de la Corte Constitucional.
“Los campesinos de inmediato intuyeron que se trataba de un pésimo presagio de esta ave de mal agüero que en el pasado, engañó a jornaleros y mayordomos de la Vereda de la Honda de Gigante para que desalojaran sus tierras con el falso compromiso de garantizarles que Emgesa los compensaría sin afectarles sus legítimos derechos”.
Son ciento los casos de desalojo a la fuerza de quienes resisten en sus hogares para defender nuestros bienes públicos. Muchos ancianos han muerto por la presión de perder sus tierras, otros se han aferrado a sus hogares donde han muerto antes de ser desalojados y otros tantos han sido desalojados a la Fuerza como a Doña Amelia sin ser compensada y menos reubicada como exige la licencia. Ahora esta anciana a sus 91 años deberá cargar el dolor de haber perdido su hogar y ahora no tener rumbo, a cambio de la desolación y la soledad que cargara por lo que resta de días.
En el marco del paro agrario los Campesinos agrupados a la organización, Asoquimbo y que desalojados por Emgesa continúan en el paro exigiendo respuesta del Gobierno a sus demandas. Días antes los campesinos fueron convocados al recinto de la Alcaldía de Garzón, el viernes 9 de mayo a las cinco de la tarde. Los esperaban el Señor Alcalde, su Secretario de Educación y Cultura, Camilo Castrillón de Emgesa y sus tinterillos, acompañados por el Capitán de la Policía del Municipio y el Coronel del Batallón Pigoanza de Garzón al momento que observaban helicópteros que volaban disparando bombas de aturdimiento y gases lacrimógenos contra los campesinos que protestan contra los Tratados de Libre Comercio y de políticas que garanticen la Soberanía y Seguridad Alimentaria y minero energética. “Castrillón a nombre de la confianza inversionista y la seguridad democrática, anunció que deberían censarse como lo ordena Emgesa como si se tratara de un listado de ‘judios’ próximos a ser conducidos a las cámaras hitlerianas de gas de Auschwitz”, confimó Asoquimbo.
La respuesta oficial de Emgesa frente a los hechos: COMUNICADO/ Sobre supuesto desalojo forzado por obras de El Quimbo en la vereda Balseadero en Garzón http://ow.ly/wRbjO