Más de 15 días llevaban encadenados a la afuera del Palacio de Justicia en Neiva, los trabajadores en condición de discapacidad, exigiendo el respeto de sus derechos.
Los manifestantes se cansaron de esperar, por no atender sus peticiones y optaron por coser la boca como salida drástica de la huelga. El líder, John Carlos Ninco manifestó que con la bandera de Colombia en alto y encadenados conmemoraron el día del trabajador, “muy tristes porque no teníamos nada que celebrar porque nuestros derechos laborales y de salud han sido vulnerados pisoteados y son pocos los que nos brindan su solidaridad, salimos a marchar unos pocos porque no podíamos ir todos a exigir que funcione el estado social de derecho para estas familias que lo han perdido todo. Con huelga de hambre y labios cosidos demostraremos que somos pocos pero fuertes y que nuestra historia cambiará”.
Se trata de miembros de la Asociación de trabajadores discapacitados y enfermos afectados por la industria minero energética. Quienes manifiestan que fueron echados de sus trabajos cuando enfermaron sin que se le brindaran medidas de acompañamiento, la salud y garantías laborales.
“Las empresa se enriquecen con nuestro trabajo, las ARL con nuestra salud, y los trabajadores enfermos son despedidos por su condición de salud”, aclaran los huelguistas. No más despidos de trabajadores que sufren accidentes y enfermedades laborales es la petición que hacen encadenados y con la boca cosida, exigiendo estabilidad y trabajo digno.
Fotos: Colectivo Macondo